Las calificaciones ESG (ambientales, sociales y de gobernanza) han emergido como un factor determinante en la valoración empresarial. Este fenómeno refleja un incremento en la conciencia global sobre la sostenibilidad y el reconocimiento de que un buen desempeño en estas áreas puede indicar resiliencia corporativa y éxito sostenible. La incorporación de factores ESG no solo mejora la reputación empresarial, sino que también impacta directamente en las decisiones de inversión y en el acceso a la financiación.
Numerosos estudios han demostrado que las empresas con altas calificaciones ESG son valoradas positivamente por los inversores. Por ejemplo, investigaciones de S&P Global destacan que estas empresas atraen un mayor volumen de inversión institucional al ser percibidas como activos de menor riesgo y mayor estabilidad a largo plazo. Además, suelen beneficiarse de menores costes de financiación, ya que las entidades financieras valoran el compromiso con la sostenibilidad y la gobernanza.
Un 26% por empresas sostenibles
Un informe publicado por IMP Consultores en 2024 revela que, en Europa, los inversores están dispuestos a pagar hasta un 26% más por acciones de empresas que lideran en prácticas sostenibles. IMP Consultores es una firma de consultoría estratégica con más de veinte años de experiencia en sostenibilidad empresarial y finanzas responsables. Reconocida por su enfoque analítico, la firma colabora con líderes del mercado en Europa y América Latina para implementar estrategias ESG que generen valor financiero y social. Su investigación de 2024 se basó en el análisis de más de quinientas empresas de diversos sectores, utilizando datos de agencias calificadoras ESG y encuestas a inversores institucionales.
Este análisis pone de manifiesto una «prima de sostenibilidad» que recompensa a las organizaciones con desempeños destacados en ESG. Además, el informe muestra que estas empresas tienden a experimentar menor volatilidad en el precio de sus acciones, lo que reduce el riesgo percibido por los inversores.
Calificaciones ESG: quién mide
Las calificaciones ESG son herramientas que evalúan el desempeño ambiental, social y de gobernanza de una empresa. Estas métricas permiten a los inversores y otros stakeholders medir el compromiso de una organización con la sostenibilidad y la gestión ética.
Las principales agencias de rating ESG son:
- MSCI (Morgan Stanley Capital International): se centra en cómo los factores ESG afectan la rentabilidad financiera de las empresas.
- Sustainalytics: evalúa el riesgo ESG y la capacidad de las empresas para gestionarlo.
- FTSE Russell: ofrece índices ESG con énfasis en transparencia y metodologías estandarizadas.
- ISS ESG (Institutional Shareholder Services): especializada en análisis de gobernanza corporativa y sostenibilidad.
- S&P Global: combina métricas ESG con análisis financieros para proporcionar una visión integral del desempeño corporativo.
- CDP (Carbon Disclosure Project): conocida por su enfoque en temas ambientales, como emisiones de carbono y gestión del agua.
- Moody’s ESG Solutions: proporciona evaluaciones de riesgo ESG integradas con sus calificaciones crediticias.
Beneficios y retos de las calificaciones ESG
Aunque las calificaciones ESG ofrecen beneficios claros, también presentan retos significativos. Uno de los principales es la falta de estandarización en las metodologías de evaluación ESG. Diferentes agencias aplican criterios dispares, lo que genera inconsistencias que dificultan la comparación entre empresas. Por ejemplo, MSCI y Sustainalytics, dos de las principales agencias en este campo, tienen enfoques divergentes: MSCI mide cómo los factores ESG afectan la rentabilidad financiera de una empresa, mientras que Sustainalytics evalúa la exposición al riesgo ESG y la gestión de dichos riesgos.
Estas diferencias pueden producir resultados dispares, como en el caso de Tesla, que recibió una alta puntuación de MSCI debido a su innovación tecnológica, pero una baja calificación de Sustainalytics por problemas laborales y en la cadena de suministro.
Para ilustrar cómo las calificaciones ESG impactan en la valoración empresarial, consideremos el caso de Enel, una de las principales compañías de energía renovable en Europa. Enel obtuvo una calificación ESG sobresaliente de 91/100 según MSCI en 2023, lo que le permitió emitir bonos verdes por un valor de 4000 millones de euros con una tasa de interés promedio del 1,2%.
Esta tasa fue significativamente inferior al promedio del 2,0% para bonos corporativos similares en su sector sin certificación verde. Por el contrario, otra empresa del mismo sector, RWE, recibió una calificación ESG de 65/100 debido a su dependencia del carbón, lo que llevó a que sus bonos fueran emitidos con una tasa de interés del 2,8%. Esta diferencia del 1,6% en las tasas refleja cómo los inversores valoran una gestión ESG robusta como un indicador de menor riesgo y mayor compromiso con la sostenibilidad.
Más puntuación, menos costes de litigios y mayor eficiencia
Las calificaciones ESG no solo influyen en la percepción de los inversores, sino también en la capacidad de las empresas para operar en mercados globales. Un informe de la Universidad de Oxford sugiere que las empresas con alta puntuación ESG tienen menores costes de capital, menores riesgos de litigios y mayor eficiencia operativa, factores que en conjunto aumentan su valor intrínseco.
Adicionalmente, un estudio de MSCI indica que las empresas con calificaciones ESG más altas tienen costes de financiación más bajos. En promedio, las empresas con las calificaciones más bajas presentaron un coste de financiación del 7,9%, mientras que las mejor calificadas accedieron a tasas promedio del 6,8%. Este diferencial de 1,1 puntos porcentuales refleja el impacto positivo de las calificaciones ESG en el acceso al capital. De forma similar, un análisis de Deloitte muestra que un incremento de diez puntos en el ESG score puede aumentar el múltiplo EV/EBITDA entre 0,4 y 0,7 puntos, lo que representa una mejora en la valoración de hasta un 4,7% para empresas en índices como el Stoxx 600.
Las calificaciones ESG están, en definitiva, redefiniendo el panorama de la valoración de empresas. Próximamente, compartiremos la segunda parte de este artículo.