Desde sus inicios, el proyecto de certificaciones de EFPA España no solo ha marcado un antes y un después en la formación de los asesores y planificadores financieros del país, sino que también ha transformado la manera en que los profesionales viven su carrera. Lo que comenzó como un reto pionero, se convirtió rápidamente en un referente de profesionalidad, ética y compromiso.
Profesionales como Antonio Peñalver y Luis Sánchez Navarrete, exdirectores de formación y RRHH en Grupo Santander y Grupo BBVA, respectivamente, jugaron un papel clave. Fueron los primeros firmantes del convenio corporativo en EFPA, un paso esencial para que los profesionales pudieran acreditar sus conocimientos. Hoy hablamos con Peñalver, que participará en el acto de clausura del 25 aniversario de EFPA en Barcelona.
¿Qué le ha aportado personal y profesionalmente apoyar el proyecto de certificaciones de EFPA España desde sus comienzos?
Apoyar el proyecto de certificaciones de EFPA España desde sus inicios ha sido, sin duda, una de las experiencias más enriquecedoras de mi carrera en el Banco Santander. Personalmente, me aportó la satisfacción de ser unos de los primeros contribuir a la creación de un estándar de calidad y profesionalidad que hoy es una referencia en el sector financiero. Profesionalmente, supuso un punto de inflexión: incorporar una visión más profesional, europea, exigente y ética de la formación financiera, que ayudó a transformar la forma en que entendemos el asesoramiento y la gestión de clientes en las entidades.
¿Qué recuerdos guarda de aquellas formaciones y primeros certificados con EFPA España?
Recuerdo aquellos primeros años con una mezcla de ilusión y esfuerzo. Era un proyecto pionero, y había mucho que construir desde cero: contenidos, metodologías, procesos de certificación… Pero también existía una enorme motivación compartida por elevar el nivel de la profesión. Los primeros certificados fueron auténticos hitos; ver a los profesionales obtener su acreditación EFPA era comprobar que la apuesta por la formación rigurosa y continua estaba dando sus frutos.
¿Cómo lo recibieron los profesionales?
Desde el área de banca comercial y personal fue recibida con entusiasmo para destacar la profesionalidad de los gestores como un hecho diferencial en el mercado financiero. Los profesionales invitados a formarse lo recibieron curiosidad al principio y con entusiasmo poco después, viendo el el hecho diferencial que suponía para su carrera profesional. Muchos vieron en EFPA una oportunidad de poner en valor su conocimiento y de diferenciarse por su competencia y compromiso ético. Con el tiempo, las certificaciones se convirtieron en un elemento esencial de desarrollo profesional y de prestigio dentro del sector financiero. Fue muy gratificante observar cómo la cultura de la formación continua y la certificación se consolidaba en las organizaciones.
Más allá de la formación. Si tuviera que destacar un valor o principio que defina EFPA España, ¿cuál sería y por qué?
Sin duda, la profesionalidad con valores. EFPA España no solo ha impulsado el conocimiento técnico, sino también el compromiso ético, la transparencia y la responsabilidad con los clientes. Esa combinación de rigor profesional y principios éticos es lo que ha hecho que la certificación EFPA sea mucho más que un título: es una forma de entender la profesión.
¿Qué consejos daría a quienes hoy forman parte de la asociación para seguir avanzando en los próximos años?
Les animaría a mantener vivo el espíritu fundacional: la búsqueda constante de la excelencia y la formación y mejora continua. El sector financiero evoluciona a gran velocidad —tecnología, sostenibilidad, nuevas formas de relación con el cliente— y EFPA debe seguir siendo un referente en la actualización del conocimiento y en la defensa de los valores profesionales. La curiosidad, la integridad y la vocación de servicio seguirán siendo las mejores brújulas para avanzar.
¿Cómo le gustaría ver a EFPA España dentro de otros 25 años?
Me gustaría verla todavía más integrada en la sociedad, como un referente no solo para los profesionales financieros, sino también para los ciudadanos que buscan asesoramiento responsable y transparente. Una EFPA España más internacional, innovadora y comprometida con la educación financiera de todos. En definitiva, una asociación que siga siendo sinónimo de confianza, ética y excelencia profesional.































